El 23 julio se espera una tormenta geomagnética débil con un índice Kp de 5 (G1), con el impacto máximo de la tormenta previsto entre las 03:00 (UTC+00) y 06:00 (UTC+00), cuando alcanzará su valor de pico.

Son posibles leves fluctuaciones en las redes eléctricas, junto con interrupciones temporales en las comunicaciones de radio de alta frecuencia en regiones polares y un impacto leve en los sistemas satelitales. Durante la noche, la aurora boreal puede ser visible en zonas cercanas a los 60° de latitud.

Actualmente no existe un consenso entre los científicos respecto al impacto de las tormentas geomagnéticas en la salud. Sin embargo, muchas personas con sensibilidad aumentada pueden reaccionar a los cambios en las condiciones geomagnéticas. En tales casos, se recomienda mantener una rutina tranquila, evitar el estrés y prestar atención a las señales del cuerpo.